Dinamic Multimedia fue una empresa española fundada en el año 1993 por los hermanos Ruiz (Pablo, Ignacio y Víctor), los cuales, tras la disolución de la antigua Dinamic, publicadora pionera en la comúnmente denominada edad dorada del software español, se asociaron con José Ignacio Gómez-Centurión y Carlos Abril para poner en los kioskos y tiendas de informática de toda España videojuegos a precios económicos que oscilaron entre 2.995 pts. en sus inicios hasta 3.995 pts. en su última etapa.
Yo Tenía Un Juego ha querido rendir homenaje a Dinamic Multimedia recopilando todos los trailers promocionales que fueron incluidos en sus CD-Rom. Por tanto, aquí os dejamos un vídeo de casi hora y cuarto para que rememoréis algunos de sus juegos como los legendarios PC Fútbol, PC Basket, Los Justicieros, Grouch, Atmosfear, Shogo: Mobile Armor Division, Speed Demons, Space Clash, Toyland Racing y muchos más. ¡Esperamos que disfrutéis con los 43 tráilers promocionales que publicó Dinamic Multimedia!
El rescate del talismán fue un concurso de televisión que se emitió entre los años 1991 y 1994 en el segundo canal de Televisión Española (TVE-2). Este programa para niños consiguió hacer, a lo largo de 78 episodios, que las tardes de los miércoles fuesen mágicas y que las mentes de los más jóvenes de la casa se transportasen a un castillo repleto de peligros a fin de olvidar durante media hora los quehaceres del colegio. ¡Era el momento de vivir una gran aventura!
El presentador del programa tenía el rol de mago master y fue interpretado por el genial Eduardo MacGregor (1991-1992), Ricardo Palacios (1992-1993) e Ismael Abellán (1993-1994). Cada uno de los magos tenía su propia personalidad, y esto se reflejaba a la hora de conducir el programa, ya que mientras uno era pura bondad, otro siempre hacía dudar a los concursantes o bien los apremiaba a realizar las pruebas lo más rápido posible, algo que habitualmente era contraproducente y lo terminaban pagando los pobres chavales.
El concurso funciona de la siguiente forma: el mago trae a su torreón a un grupo formado por cuatro jóvenes denominados emisarios, que están dispuestos a rescatar el talismán que El Señor De La Maldad ha robado al Rey. Mágicamente convierte sus ropajes en atuendos medievales y uno de ellos se dispone a ser el primero en entrar al castillo embrujado. Para poder cumplir su misión, el mago le dota de un zurrón en el que podrá guardar los materiales mágicos que encuentre o le den ciertos personajes que irán apareciendo durante su búsqueda; además, a nuestro protagonista le colocan un yelmo en la cabeza para que no pueda ver nada, pues el simple hecho de mirar dentro del castillo haría que el emisario quedase preso por el hechizo de El Señor De La Maldad.
Todo el castillo, excepto el torreón del mago y la guarida de El Señor De La Maldad está realizado de forma digital haciendo uso de cromas.Cabe destacar los maravillosos fondos que se muestran en pantalla, tan avanzados para la época, que en todo momento el espectador se siente partícipe de la aventura.
El emisario se encuentra en una estancia y debe avanzar hasta la siguiente guiado únicamente por las voces de sus compañeros, los cuales desde el torreón dan indicaciones como «gira 45 grados hacia tu derecha y avanza recto» o«da dos pasos pequeños hacia la izquierda y agáchate para recoger un objeto». Por supuesto, estas órdenes se dan a gritos y solapándose unos a otros, fruto del nerviosismo producido por el hecho de que el emisario pueda caer por una abertura o chocarse contra cualquier elemento del decorado. Recordemos que el castillo está embrujado y sólo se pueden tocar ciertos objetos mágicos que no han sufrido encantamiento alguno.
La primera prueba consiste en contestar correctamente, con la ayuda del resto de concursantes, a una pregunta para ganar un anillo de salvación. En caso de errar, el mago master saca un dado y comunica a los aventureros el significado de los números: unos harán que el emisario vaya directo al calabozo, otros permitirán que pueda continuar su aventura, o si tiene suerte y saca el número correcto, ¡incluso podrá recuperar el anillo de salvación!
A lo largo de la aventura, el emisario se encontrará con innumerables personajes de diferente índole, los cuales le introducirán en su papel y le harán una pregunta que debe contestar correctamente. Si consigue acertar, puede que obtenga un artilugio mágico y sus amigos podrán seguir guiándole hasta la salida del escenario, pero si falla, irá al calabozo.
Cuando un emisario falla en su intento por conseguir el talismán, es sustituido por otro aventurero, el cual seguirá siendo guiado por el resto de sus compañeros. En caso de que todos fallen y sólo quede uno, el mago master será el encargado de darle las instrucciones pertinentes para que pueda llegar hasta El Señor De La Maldad y tratar de combatirlo.
En ciertos escenarios existen objetos mágicos que el emisario debe recoger, ya que serán usados en otras estancias cuando algún personaje se lo solicite o la propia habitación requiera de su uso, ya sea para encender las luces, abrir la puerta correcta de entre varias disponibles, activar cierto mecanismo, etc.
En cada episodio emitido, la mayoría de los escenarios y personajes cambian, por lo que no es muy habitual volverlos a encontrar en nuevas emisiones del programa; pero si esto ocurre, aparecen en estancias diferentes a las que en otras ocasiones pudimos encontrarlos, y por supuesto, nunca se repiten las preguntas que formulan. En cualquier caso, los cuatro concursantes deben estar siempre muy atentos a las historias que los personajes del lugar le cuentan al emisario, puesto que en el penúltimo escenario, antes del enfrentamiento final, deben contestar 3 preguntas correctamente en relación a los hechos ocurridos durante el programa.
Cada acierto activa una nueva baldosa, por lo que una vez estén todas visibles y el aventurero sea guiado hasta el emblema situado en la cuarta baldosa, aparecerá el Rey del castillo, el cual le enseñará al emisario un conjuro mágico que debe memorizar. Una vez que el Rey desaparezca, el aventurero debe ser guiado hasta el trono y sentarse para ser mágicamente teleportado a la sala donde se encuentra El Señor De La Maldad.
Este es el último escenario de la aventura y está recreado en plató, por lo que no hay croma ni efectos digitales de ningún tipo. Una música en clave de tensión comienza a sonar y el emisario debe quitarse el yelmo. De pronto entra en escena El Señor De La Maldad, el cual empieza a desternillarse a carcajada limpia mientras se acerca al joven. Una vez se quita el talismán que porta en su cuello, intenta atraer al emisario, y éste debe pronunciar el conjuro que memorizó en el escenario anterior a fin de derrotarlo y poder por fin robarle su más preciado tesoro. Es muy importante que el emisario pronuncie las palabras mágicas una vez que su enemigo se haya quitado el talismán pero antes de que le ponga una mano encima; si erra en esta tarea, todo su esfuerzo junto al de sus compañeros habrá sido en balde.
Cuando El Señor De La Maldad es al fin derrotado, se procede a sacar una espada de la pared para desactivar el mecanismo que desbloquea el calabozo y poder así liberar a los emisarios perdidos por el camino. Todos se reúnen en torno a un altar, el cual se abre automáticamente cuando el mago master deja encima durante unos segundos el talismán. Ahora es cuando a todos los chavales de la época se nos hacía la boca agua porque aparecían en escena los premios que se llevaban los concursantes para casa: unas flamantes consolas Mega Drive, Master System II, Game Gear y un montón de videojuegos molones.
Tanto la versión española del concurso como la original británica Knightmare(La Pesadilla Del Caballero, juego de palabras formado por Knight + Nightmare) y la edición francesa llamada Le Chevalier Du Labyrinthe (El Caballero Del Laberinto) estuvieron esponsorizadas por Sega, así que a pesar de que los regalos no eran muy medievales que digamos y contrastaban de forma extraña con todo el ambiente medieval... ¡daba igual! Todo era genial y magnífico. El Señor De La Maldad había muerto, los concursantes se iban casa con unas consolas increíbles y los espectadores alucinaban con lo que acababan de contemplar en televisión durante cerca de media hora. El cierre del show mostraba los créditos del programa mientras sonaba una sintonía muy pegadiza compuesta por Patrick Oliver, interpretada por Iñaki Egaña y letra escrita por Rafael Calvo.
Los creadores del programa original para la televisión británica fueron Tim Child y David Rowe, los cuales comentaron que estuvieron muy inspirados a la hora de idear el concepto de su show por el juego Atic Atac de la compañía Ultimate Play The Game para BBC Micro y ZX Spectrum. El programa se emitió en la cadena CITV desde el 7/11/1987 hasta el 11/11/1994.
Como curiosidad, comentar que el gran éxito que originó en su momento el programa, hizo que la famosa compañía MB sacase a la venta un juego de mesa en el año 1991. Podían participar de 2 a 4 jugadores y la caja estaba compuesta por: tablero, base del castillo, castillo troquelado, 56 cartas, 4 soportes de plástico, dado, libro de enigmas, 12 fichas de objeto, 12 fichas de casco y 4 personajes de plástico.
Para concluir, tenemos una buenísima noticia que dar, y es que el archivo de RTVE por fin ha hecho caso a las plegarias de todos aquellos que disfrutábamos de este show y han empezado a restaurar los programas. A fecha de publicación de este artículo ya están terminados los dos primeros shows que se emitieron en la televisión pública y te los traemos para que, tras la lectura de este artículo, puedas permanecer cerca de una hora pegado a la pantalla disfrutando de la joya que fue este programa. Animamos desde aquí a RTVE y a Televisión Española para que continúen poco a poco su labor de recuperación de este tesoro televisivo y que así, con el tiempo, podamos disfrutar del show completo. ¡Televisión así ya no se hace!
El estándar MSX recibe un nuevo juego: Paco El Bombas, de José Luis Salguero y con música de Sergey Kosov. ¿Y de qué me suena a mí esto de las bombas? ¡En efecto, es un tributo al clásico Bomb Jack! Pero ojo, decimos tributo, no remake, porque no se trata de una conversión de la recreativa de Tehkan (después conocidos como Tecmo, y actualmente Koei Tecmo). Paco El Bombas es un juego completamente distinto, con niveles originales en los que la premisa es la misma que en el arcade: recoger todas las bombas para pasar de nivel.
Sin embargo, hay muchas diferencias con Bomb Jack en cuanto a jugabilidad. Para empezar, el salto no es tan alto de inicio, aunque lo podremos ampliar si recogemos el objeto correspondiente. Pero la principal diferencia es que podrás recoger las bombas en el orden que desees, y además sin límite de tiempo, lo que te permite trazar la estrategia más adecuada a la hora de moverte por la pantalla. Por supuesto, hay multitud de enemigos con trayectorias prefijadas, que te lo pondrán complicado, pues el autor se ha cuidado mucho de situarlos en los lugares por los que tendrás que pasar forzosamente a la hora de recoger las bombas.
El juego aún tiene algunos detalles que pulir, pero sabemos de buena tinta que su autor va colgando versiones actualizadas a medida que realiza mejoras. Paco El Bombas es un juego sencillo que no pretende ofrecer una experiencia estratégicamente compleja, sino que se posiciona del lado de los arcades directos. Diversión sin complicaciones para partidas rápidas con tan solo tres botones...y tres vidas. Eso sí, te aviso: cada vez que veas el letrero de Game Over, una voz interior te dirá: "Seguro que si lo intentas de nuevo pasarás a la siguiente pantalla".
La versión digital de Paco El Bombas es gratuita y la puedes descargar desde MSX Games World haciendo click aquí. ¡Muchas gracias a los autores por seguir dotando de juegos nuestros retrocacharritos favoritos!