JAIME: Quería deciros que hoy hace tres años que empezamos a escribir el número 1 de
Yo Tenía Un Juego.
Siempre he sido muy malo para acordarme de los aniversarios, y por eso
ha tenido que ser Sergio quien me lo recordase. Supongo que la atención
al detalle forma parte de la formación profesional de un diseñador
gráfico, ¡y él es muy bueno en lo suyo!
El
primer agradecimiento sin embargo debe ir hacia todas las personas que
leéis nuestra revista, que estáis pendientes de las actualizaciones de
la web, de lo que compartimos en Facebook o de los mensajes que
twitteamos. Está claro que hubieran sido tres años mucho más solitarios
sin vosotros, y lo que os puedo asegurar es que por entonces no pensaba
que las anécdotas, chascarrillos y devaneos mentales de este humilde
retrojugador fueran a resultar de interés para alguien más que para mi
familia y amigos más cercanos.
Cuando me planteo qué me ha aportado Yo Tenía Un Juego
como persona lo primero que me viene a la cabeza es el gran grupo
humano que formamos esta aventura. Es cierto que escribimos la revista
sólo entre cuatro personas (Víctor, ¡se te echa de menos!), pero os aseguro que el producto que os
podemos ofrecer no sería tan bueno sin la colaboración y el apoyo diario
de un montón de amigos que hemos hecho precisamente gracias a esta
iniciativa. Habitualmente suele decirse que es mejor no nombrar a nadie
por si se deja algún nombre importante en el tintero, pero como ellos se
lo merecen, voy a arriesgarme: Julio y su predisposición infinita a
ayudar, Primy con su juego, Dani y la paz que transmite, Ricco siempre
con un chiste a punto, Carlos y Rubén con su elegancia y saber estar,
Marcos con sus inagotables conocimientos, Ricardo y su veteranía y
habilidad, Paco y su generosidad.... ¡gracias a todos, y por favor,
seguid con nosotros muchos años más!
También
quiero destacar la labor de Sergio, que no sólo se encarga del cien por
cien de la maquetación de cada ejemplar, sino de toda la coordinación
que supone que cada uno sepa lo que tiene que escribir y sobre todo que
las cosas estén a tiempo. Su experiencia profesional en el sector y su
valía no sólo como redactor sino como artista gráfico nos dejan
asombrados número tras número. Sólo tenéis que echar un vistazo a las
portadas en orden cronológico para daros cuenta de cómo han ido ganando
en calidad, ¡y qué decir de la maquetación actual con respecto a la
original! Me siento orgulloso de poder aprender de un profesional como
él, y afortunado por poder llamarle amigo.
Por
último, pero no menos importante, estos tres años no hubieran sido
posibles sin la eterna paciencia de nuestras parejas, y por supuesto sin
su colaboración, ya sea en forma de portadas para nuestros videojuegos o
traducciones varias. ¡Se han ganado el cielo!
¡Gracias a todos!
SERGIO:
Allá por 2007 comencé a escribir algunos artículos de opinión en varios
periódicos y revistas locales, aunque paré de hacerlo porque al año
siguiente se me ocurrió la idea de crear una revista musical en B/N
llamada
Ashes Fanzine, la cual terminó derivando en
Ashes Magazine,
una publicación en color que llegamos a distribuir tanto en papel como
en formato CD-Zine. Tras esto, pasé tres años colaborando como redactor
en la revista
Nintendo Acción, al mismo tiempo que completaba mis estudios de artes gráficas.
Si os cuento esto es porque hoy Yo Tenía Un Juego
cumple tres años y aunque en el cajón de los recuerdos guardo momentos
de todos los colores, creo que no puedo compararlos con la sensación que
hoy día me produce todo lo que rodea a nuestra publicación. De no ser
por ella es muy probable que nunca hubiese conocido a mis amigos y que
en este tiempo se han convertido en parte de mi familia. Sinceramente,
no sé que haría sin ellos en mi día a día.
Pero ahí no acaba la cosa... ¡qué va!; también hemos conocido a muchísima gente estupenda (ver:
www.yoteniaunjuego.com/p/links.html), hemos participado en varios eventos, tenemos en nuestras manos
Escape From The Sewers, un videojuego en el que la revista es protagonista y que ha sido posible gracias a
Primy así como una
aventura conversacional creada por el gran
Joruiru, lanzamos anuarios en DVD con un montón de extras exclusivos e incluso gracias a mi queridísimo amigo
Carlos (@carlosblansa) tenemos hasta un
canal de YouTube
en el cual subimos sus gameplays comentados. ¡Por cierto!, no me
cansaré de decir que Carlos es un excelente jugador pero es aún mejor
persona.
Por
supuesto, la revista no existiría sin todos los amigos que nos apoyan y
que están dispuestos a echarnos una mano en todo lo que necesitemos,
dejándose la piel aunque haga frío, llueva o truene (ellos saben quienes
son, básicamente porque les digo que los quiero cada vez que tengo
oportunidad de hacerlo). Estoy muy orgulloso de ellos, al igual que lo
estoy de Jaime Pérez, Rubén Sánchez y Sara Sánchez, pues sin sus
artículos nuestra revista nunca podría llegar a vuestros dispositivos.
Me encanta poder contar con ellos para todo y es que, por muy alocada
que sea una idea... ¡siempre están ahí para hacerla realidad! Gracias
por todo chicos, sois geniales de la muerte morena.
¿Y qué sería de Yo Tenía Un Juego
sin nuestros lectores? La verdad es que nos encanta contaros nuestras
batallitas, pero lo que más nos gusta es crecer y hacerlo en compañía de
todos vosotros. Muchas gracias por leernos, por escribirnos, por
preguntarnos, por contar con nosotros, por hablar de nosotros a vuestros
allegados, por imprimiros la revista, por hacer magazine-crossing en el
trasporte público, por interesaros por los anuarios en DVD y por cada
cosa que hacemos, pero sobre todo, GRACIAS por hacernos sentir
bien, pues cada vez que escribimos sabemos que hay alguien al otro lado
de la pantalla que está dedicando parte de su tiempo y de su vida en
leernos, ya sea para pasar un buen rato o para sentirse identificado con
nuestras vivencias.
Tú, estimado lector, eres la piedra angular de
YO TENÍA UN JUEGO